mayo 18, 2024

Brasil pasó a cuartos de final de la Copa América tras barrer a Perú por 5-0, en Sao Paulo.

Perú, con un inicio intenso y con ganas de sorprender a la anfitriona, se resquebrajó a partir del segundo gol, tras una falla del portero Pedro Gallese, que contuvo un penal de Gabriel Jesús en los descuentos, evitando un desangramiento mayor.

Con este resultado, Brasil avanza como líder del Grupo A hacia los cuartos de final de la Copa América, seguida por Venezuela, mientras que Perú quedará esperando a si consigue avanzar como uno de los dos mejores terceros de la primera fase.

Con la organización de Perú quebrada, llegó el momento del atacante más aclamado. Everton del Gremio se despunta por su izquierda, dribla, mide al lateral Advíncula, y su disparo dibuja una trayectoria trazada con una regla mental que se cuela por el rincón derecho de Gallese. Así se fueron al descanso.

Aunque Brasil todavía le debía más alegrías a su gente. Everton volvió metiendo susto a la defensa peruana. Luis Abram y Miguel Araujo no conseguían nada. Luis Advíncula hacía lo que podía, pero los duelos eran ganados por el atacante del Gremio. Coutinho avanzaba dando pases de taco, habilitando a Filipe Luis y Everton.

Los gritos de «olé, olé», a cada pase de Brasil, retumbaban en el estadio, mientras los muchachos de Gareca se encogían en el gramado. El romance de la Canarinha con la torcida iba en creces.

Un Perú ya muerto, el capitán Dani Alves marcó el cuarto a los 53 minutos, en combinación con Firmino. Pero quien haría la autopsia fue un recién ingresado Willian a los 90, con un disparo desde fuera del área que se fue a encajar en el ángulo de Gallese.

En los descuentos, el portero del Alianza Lima ahogó el sexto gol de tiro penal de Gabriel Jesús. Si anotaba, no hubiera quedado un solo delantero en terreno sin marcar.

Los incas organizaban ataques con Advíncula, Tapia y Polo, recuperaba rápido el balón con Tapia y Yotún y alternaba el ataque por la otra banda con Cueva y Farfán, que buscaban a un Guerrero que nunca llegó. Con todo perdido, el hombre del Internacional fue reemplazado.